El conflicto parece entrar cada vez más en un callejón sin salida, pues como se informó oportunamente, aún queda pendiente una reunión entre las partes para el martes 15 de mayo, con una agenda abierta sobre diferentes temas sanitarios, donde ya fue confirmado por el subsecretario del área de Personal, Pablo Pais, que no se tratará el tema salarial.
El paro se realizará de 8 a 18 bajo la consigna “Ningún trabajador municipal bajo la línea de pobreza”.
El acatamiento a las medidas anteriores fue muy alto –más del 70 %- lo que juega, en principio, a favor de los trabajadores que reclaman. Pero también es cierto que repetiry repetir la metodología de la huelga, sin obtener resultados concretos, a la larga terminará por desgastar a los empleados municipales y a fastidiar a los pobladores que dejan de recibir el servicio.
Es evidente que a esto último es a lo que apuesta el Municipio, para el cual, no obstante, también es un problema tener vecinos descontentos, por falta de asistencia en un área tan sensible como la de la salud, en un año electoral como el actual.
Gustavo Camps
Especial para El Comercio On Line