El surfer que en marzo pasado fue demorado en la autopista Panamericana cuando volvía de Brasil y que se fugó en plena cuarentena a la localidad de Ostende y el personal trainer de Olivos que golpeó a un vigilador que lo denunció por incumplir el aislamiento, fueron procesados por la Justicia federal de San Isidro por violar la medida decretada ante la pandemia del coronavirus.