En una decisión que ha generado controversia, el Gobierno argentino suspendió la emisión de billetes de $2000, a la que calificó como un “sinsentido”. La medida fue anunciada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, durante una conferencia de prensa habitual.
La suspensión de los billetes de mayor denominación responde a la necesidad de modificar la estructura monetaria “heredada de la administración anterior”, que, según el gobierno, se negó a emitir billetes de mayor valor. “A partir de mañana habrá algún detalle más. La emisión de billetes de baja denominación es un sinsentido,” afirmó Adorni, quien anticipó que se proporcionará información adicional sobre las medidas a tomar.
Además de la suspensión de los billetes, el gobierno anunció la intervención de la Casa de Moneda por un período de 180 días. Esta intervención será dirigida por Pedro Daniel Cavagnaro, quien ha estado trabajando en la reestructuración de la entidad para adaptarse a las nuevas directrices del gobierno.
La decisión ha suscitado reacciones diversas en la sociedad, donde algunos consideran que la medida es necesaria para enfrentar los desafíos económicos del país, mientras que otros cuestionan el impacto que podría tener en la circulación del efectivo.
La suspensión de la emisión de billetes de $2000 marca un nuevo capítulo en la política monetaria argentina, en un contexto donde la inflación y la búsqueda de soluciones efectivas para la economía son temas prioritarios en la agenda del gobierno.

