La cartera sanitaria recordó que como principal medida de prevención se encuentra “la prevención y el control del mosquito Aedes aegypti”, la cual, “se basa en prevenir la aparición del mosquito adulto y la aparición de formas inmaduras, impidiendo que lleguen al estado de adultos”.
Al ser el mosquito una especie con hábitos domiciliarios que se cría en recipientes con agua, se recuerdan las medidas que deben ser tomadas con el fin de eliminar huevos y larvas.
Por lo pronto, se recomienda “limpiar, fregar y secar bien el interior de recipientes que pueden juntar agua; tirar agua hirviendo en canaletas y rejillas” y cubrir “las rejillas con tela mosquitera”.
También “dejar dados vuelta los envases que pueden acumular agua”; “evitar tener recipientes con agua acumulada” y “renovar agua de floreros y mascotas cada 2 o 3 días”.
Los síntomas del dengue son fiebre alta (sin resfrío), dolor detrás de los ojos, muscular y de las articulaciones, náuseas y vómitos, cansancio, sangrado de nariz y encías y erupción en la piel.
Frente a estos síntomas es importante acudir rápidamente al médico y no tomar aspirinas, ibuprofeno, ni aplicarse inyecciones intramusculares.
El 4 de enero pasado, el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, presentó el Plan Integral de Lucha contra el Dengue y destacó la importancia de “trabajar durante todo el año” para eliminar los bidones, floreros, cacharros “y todos los lugares donde se puede criar el mosquito”.
Se trata de un plan estratégico y operacional para prevenir, controlar y vigilar las enfermedades transmitidas por el mosquito Aedes Aegypti: las medidas se basan en prevenir la aparición del mosquito adulto a partir de la eliminación de los huevos y larvas.
