Mouriño, mano derecha del presidente de México, Felipe Calderón, regresaba en la avioneta desde San Luis Potosí, en el centro del país, según indicó el secretario de Comunicaciones y Transporte federal, Luis Tellez, citado por la agencia alemana DPA.
En el mismo accidente falleció Luis Vasconcelos, ex subprocurador general de México y actual asesor del gobierno de Calderón. Junto con los dos altos funcionarios murieron por lo menos ocho personas más, declaró Ebrard, quien aclaró que aún no se pudo determinar si todos los fallecidos viajaban en la nave accidentada.
Ebrard, quien llegó inmediatamente del accidente, indicó que en la nave, un Lear Jet del gobierno, viajaban, además de los dos pilotos, por lo menos cinco personas del entorno de Mouriño.
Además, 40 personas que estaban en tierra resultaron con heridas de distinta entidad, por lo menos unos cinco graves y más de mil personas fueron evacuadas de las zonas cercanas ya que tras la caída de la nave se desató un fuerte incendio.
Por lo menos 30 vehículos fueron dañados, 10 totalmente quemados y otros 20 parcialmente.
El presidente Calderón manifestó su "enorme pesar" por la muerte de Mouriño.
Con voz que se le quebraba por la emoción, Calderón recordó que Mouriño fue su compañero de actividad política por varios años señalando que juntos soñaban con "una patria nueva" y que nunca dudó en "empeñar hasta la vida" en lograr mejorar el país.
El mandatario dijo que Mouriño en su labor "hizo posible que gobierno avanzara en sus objetivos", en una corta alocución en el aeropuerto de la Ciudad de México tras regresar de urgencia desde la ciudad Guadalaja, en el occidente de México.
Durante la campaña electoral de Calderón por la presidencia de México Mouriño fue su mano derecha y cuando Calderón asumió, ocupó la Secretaría de la Presidencia primero y luego el cargo actual.