Junto a la demanda civil, la víctima inició una causa penal en la que el hombre de seguridad fue condenado a dos años de prisión en suspenso por lesiones graves.
Los jueces Fernando Racimo, Juan Carlos Dupuis y Mario Calatayud, de la Sala E de la Cámara Civil, explicaron que el dueño del boliche estaba obligado a brindarle a la víctima "seguridad de que saldrá del sitio sano".
"No cabe duda de que el vínculo jurídico que unió al actor con la empresa apelante es de naturaleza contractual, pues quien concurre a un local bailable a divertirse solo o con amigos se relaciona jurídicamente con el proveedor del servicio", completaron los jueces.
La Cámara también rechazó el argumento de que el 'patovica' "se haya extralimitado en sus funciones, toda vez que quedan comprendidos aquellos hechos ocasionados por la ejecución defectuosa de las funciones, el ejercicio aparente de las funciones y también el abuso de las funciones".
El joven fue indemnizado para reparar su incapacidad sobreviviente, el daño moral, los gastos médicos y el costo de una futura intervención quirúrgica a la que deberá someterse, explicaron los voceros.