Hasta el momento, podían conducir quienes tuvieran hasta 0,50 miligramos de alcohol por litro de sangre.
Anoche, el Senado bonaerense dio media sanción a un proyecto que reforma el Código de Tránsito provincial y establece que no podrá tomarse alcohol antes de conducir.
Esta modificación fue introducida por los senadores tras evaluar que una de las principales causas de los accidentes viales está en la conducción tras la ingesta de alcohol.
El proyecto, que fue girado a la Cámara baja provincial para su tratamiento, establece además que los menores de entre 17 y 21 años, deberán renovar el carné de conductor todos los años.
La iniciativa fue enviada meses atrás por el Ejecutivo provincial, tras declararse la emergencia vial en la provincia de Buenos Aires a raíz del aumento de los accidentes automovilísticos registrados.
El proyecto dispone la creación de juzgados de infracciones de tránsito provinciales y el regreso de los radares a las rutas para controlar los excesos de velocidad, y prevé severas multas a quienes violen los límites permitidos.