Según el directivo, "en el caso de la industria automotriz, todos los actores de la cadena tienen un plan común que es el 'Plan un millón' (de autos), y trabajan todos juntos en la mesa de trabajo para encontrar soluciones".
En un aparte con Télam, tras la presentación del renovado modelo a la prensa de Argentina, Chile y Uruguay, Galmarini destacó el "muy buen momento" que vive el sector en el mercado local con respecto a ventas.
"Va a ser un segundo año de crecimiento fuerte, de alrededor de 25%, con unos 870 mil autos vendidos este año", dijo, y continuó: "Mes a mes nos sigue sorprendiendo el ritmo de ventas, la demanda en la Argentina está muy sostenida".
Según la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara), el patentamiento de vehículos mantuvo en julio su tendencia positiva con un incremento de 22,6% en relación con igual mes de 2016, y acumuló un crecimiento de 32,2% en los primeros siete meses del año respecto del mismo lapso del año anterior.
No obstante, Galmarini admitió que diferente es el tema de la producción: "Es un desafío; la industria automotriz argentina tiene un perfil exportador, su razón de ser es exportar; y nuestro principal mercado, Brasil, ha pasado de vender 3.600.000 autos a 2.100.000, y eso tiene un impacto muy fuerte en la producción".
"La buena noticia es que parecería que encontró un piso y que de a poco Brasil se empieza a recuperar, eso da una cierta previsibilidad de la que la caída se detuvo", enfatizó, aunque lamentó que la región (el Mercosur) mantiene una capacidad ociosa instalada de 50%.
La producción nacional de vehículos se incrementó 1,2% interanual en julio, mientras que las exportaciones crecieron 12,2% en el mismo período, según la Asociación de Fabricantes de Automotores (Adefa).
Para el ejecutivo de Ford, es problema principal es la competitividad: "Si queremos fabricar más autos en la Argentina necesitamos ser más competitivos y tener más acuerdos comerciales con otros países para poder exportar autos".
El ejecutivo automotriz agregó que "esas dos cosas tienen que desarrollarse juntas, si queremos llegar al millón de autos" previsto en el plan estratégico del sector, y a la vez saludó el hecho de que "todos los actores han firmado ese compromiso y las mesas de trabajo están funcionando".
Galmarini también pidió "no ser ansiosos y darle más tiempo porque los cambios estructurales llevan tiempo", porque -auguró- "el aumento de la producción se va a dar con el crecimiento de Brasil, pero también por el aumento de la competitividad y los acuerdos comerciales"..
Según el directivo de Ford, hay que trabajar sobre los "factores estructurales" que afectan a la competitividad, como la "alta presión impositiva sobre la producción" en el país; enfocados en los "alrededor de 15 puntos de impuestos indirectos que la industria automotriz exporta".
Otro tema que afecta a la competitividad es, aseguró, el atraso en la infraestructura (electricidad, gas, transporte).
No obstante, reconoció que "en los últimos tiempos ha mejorado, se están haciendo muchas obras, se está trabajando en un plan de mediano y largo plazo, cuyos resultados se van a ver en muchos años".
En otro orden, consideró "muy importante bajar la inflación, que distorsiona todos los precios relativos y hace muy difícil hacer planificación de mediano y largo plazo, y lograr eficiencias reales", y afirmó que "el tipo de cambio no otorga competitividad".
"La industria automotriz piensa en el largo plazo, por sus características, por eso estamos mirando siempre el largo plazo, no en la cuestión coyuntural; en el caso específico de Ford somos muy optimistas, creemos que hay una industria automotriz posible y que puede crecer en la Argentina", concluyó.
La Nueva Ecosport, presentada en el último Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires, llegará a la red de concesionarios a mediados de septiembre; se trata de un producto desarrollado en Sudamérica que se transformó en una plataforma global de la marca y alcanzará más de 140 mercados en todo el mundo, incluyendo Estados Uidos.
