Las fuentes contaron que los seis delincuentes llegaron armados e interceptaron al camión de la empresa Brinks que estaba por abandonar el lugar, porque ya habían cargado las sacas con el dinero que habían ido a buscar al local.
Los delincuentes lograron reducir a los tres custodios y les quitaron las tres pistolas calibre 9 milímetros que llevaban.
Sin embargo, no pudieron robar dinero del camión porque en el momento en el que llegaron al local, uno de los custodios ya había puesto a resguardo las sacas con el dinero en la parte trasera del vehículo.
Los investigadores sospechan que el grupo de delincuentes que se escapó en dos autos tras cometer el hecho, y que serían todos mayores de edad, ya habrían participado de otros hechos similares en la zona.