Activistas Argentinos detenidos en Rusia enfrentan cargo de piratería, que prevé hasta 15 años de prisión
El grupo de activistas de Greenpeace detenido en Rusia desde la semana pasada, entre ellos dos argentinos, comenzó a ser investigado por la presunta comisión del delito de "piratería", que según la legislación de Moscú puede acarrear una pena de hasta 15 años de cárcel.
La prensa internacional reportó esta mañana que las autoridades rusas abrieron una investigación por "piratería en grupo organizado" contra los detenidos, que serán procesados "independientemente de su nacionalidad".
Los activistas estaban en el barco Arctic Sunrise, un rompehielos que lideró la protesta contra la compañía de energía Gazprom.
Por la situación de Speziale y Pérez, compañeros en la organización reclamaron el jueves pasado ante la Embajada de Rusia por su liberación, como así también la de los otros 28 ambientalistas detenidos.