Arrabarrena indicó que "lo grave de empezar perdiendo es que no se sabe cuando se termina de perder".
"En el primer tiempo teníamos el partido controlado, pero después del gol de Boca el equipo se desequilibró y dio ventajas que Boca no perdona", analizó.
El camino para Arrabarrena es "tratar de ser el equipo del primer tiempo, pero con mayor potencia ofensiva".
Tigre tiene un nuevo desafío el próximo domingo cuando reciba a River Plate en Victoria.