28.07.2011 - 0:00 | Deportes

En su debut, Boca perdió 3-1 con el Espanyol de Barcelona

Boca Juniors perdió ayer 3-1 ante el Espanyol de Barcelona en un partido amistoso que se desarrolló en el estadio Cornellá-El Prat, al que asistieron unos cinco mil hinchas del equipo argentino.

Darío Cvitanich puso en ventaja Boca, a los 11 minutos del segundo tiempo, pero Daniel Osvaldo, a los 15 y 32, el primero de penal, y Joan Verdú, también desde los 12 pasos, le dieron la victoria al equipo dirigido por el argentino Mauricio Pochettino.

Tras este partido, Boca viajará rumbo a Londres, donde jugará la Copa Emiratos, junto al Arsenal de Inglaterra (sábado 30, a las 12 de la Argentina), el Paris Saint Germain (domingo 31, a las 11) y el Nueva York Red Bull de los Estados Unidos.

En este primer amistoso de la temporada, un encuentro por momentos de tono muy discreto, Boca mostró algunas aristas interesantes, especialmente por el lado de las individualidades, y repitió viejos errores, principalmente en la defensa.

Entre los rescatable habrá que señalar el buen primer tiempo de Juan Román Riquelme y Walter Erviti, y el buen complemento que jugó Cvitanich.

Tanto Riquelme como Erviti se mostraron rápidos en sus movimientos, y a diferencia de lo hecho en la última temporada, el segundo de ellos llevó el balón hacia adelante y no lo lateralizó.

Tras jugar un primer tiempo en el cual jugó lejos y de espalda al arco, Cvitanich se fue mucho más al área y exigió a los defensores del Espanyol con sus movimientos.

El ex delantero de Banfield y el Ajax de Holanda coronó su buena actuación con un gol de cabeza.

Entre lo negativo del equipo dirigido por Julio César Falcioni habrá que mencionar los viejos desacoples en la defensa, especialmente por el sector de Clemente Rodríguez, quien fue superado muy seguido y, en ocasiones, recurrió al juego brusco, algo de lo que puede dar fe el volante Ernesto Galán, receptor de una violenta infracción en uno de sus tobillos.

Después del 1-1 (penal convertido por Osvaldo, luego de que el árbitro Xavier Estrada Fernández cobrara una inexistente falta de Facundo Roncaglia al mismo Osvaldo), la defensa colapsó.

Este quiebre en la defensa de Boca se vio reflejado en el segundo gol del equipo español, cuando una pelota cayó detrás de centrales y Sergio García la cruzó hacia el sector derecho, donde Osvaldo, sin marcas, la empujó al fondo de la red.

Con casi quince minutos de partido por delante, Boca sintió el desgaste físico y no inquietó al arquero del Espanyol, el argentino Cristian Alvarez, quien en ciertos momentos mostró cierta inseguridad.