Según se informó en un comunicado, tanto las redes de Telecom como el Backbone IP están siendo preparados para el soporte dual-stack (de ambos protocolos) y se encuentran conectados a la red Internet IPV6. Esta prueba forma parte del proceso de preparación para el modificar el acceso de banda ancha.
"Si bien desde el año pasado la compañía tiene algunos grandes clientes con servicio IPV6, durante 2011 y a partir de las pruebas que comenzaron ayer se comprobará la experiencia de servicio con el resto de Internet", se informó.
El reemplazo de IPV4 por IPV6 se realizará en algunos años más, por lo que ambos planos de direccionamiento coexistirán durante un tiempo. Este cambio será transparente para los clientes y no impactará en los servicios que le brinda Telecom.
Está previsto que en Argentina el agotamiento del espacio de nuevas direcciones IPV4 para nuevos clientes se de recién alrededor del año 2013/14. En el resto del mundo, se espera que el protocolo IPV4 se agote en 2011 (Asia) y 2012 (Europa, Norteamérica).
Se estima que una de las principales fuentes de demanda de nuevas direcciones para los próximos años sea la banda ancha móvil.