15.07.2008 - 0:00 | Actualidad

Patricia Nine revivió el dramático rescate de su cautiverio de 25 días

Patricia Nine, la hija del dueño de un shopping de Moreno que en 2004 estuvo 25 días secuestrada, relató hoy cómo la capturaron y que el momento más dramático de su cautiverio fue cuando la Policía la rescató a los tiros y murieron dos de sus captores.

"Sentí unos golpes y cuando me quise dar cuenta tenía a dos personas encima, eran 'Tito' y su ayudante (por sus cuidadores). Ahí me di cuenta de que eran tiros. Tito me miró y se pegó un tiro en la cabeza y el otro cayó herido y me dijo que gritara 'Soy
Patricia, soy Patricia!'. Entonces, entró la Policía y terminó todo", relató la mujer.

Nine declaró esta mañana ante el Tribunal Oral Federal (TOF) 3 de San Martín, que juzga a cuatro imputados por su secuestro, dos de los cuales se negaron a declarar y dos que se aseguraron ser inocentes.

Con voz pausada y vestida con jeans y un saco largo, Nine relató al tribunal que la mañana del 28 de septiembre de 2004 iba en su Chevrolet Astra junto a sus dos hijas y sus dos sobrinos rumbo al colegio "Bartolomé Mitre Day School" de Moreno cuando otro vehículo le cerró el paso.

"Descienden dos personas armadas, uno con un arma larga (un FAL) y una capucha del hombre araña. Ese me empieza a golpear el vidrio de la puerta con el arma para que le abra... Yo estaba desesperada por los chicos, entonces abrí y me sacaron a la fuerza", recordó.

Según la víctima, que por entonces tenía 37 años, la pasaron a otro auto, le dijeron que se tirara en el piso del asiento trasero y luego le taparon el cuerpo con varios trapos.

"Lo que me llamó la atención fue que en esa zona, que es muy transitada a esa hora, en el momento en que me sacan y me tiran adentro de otro auto una mujer frenó su coche al lado mío, se bajó y siguió caminando como si nada", aseguró.

La mujer explicó a los jueces Elbio Osores Soler, Lidia Soto y Hugo Gurruchaga que el diálogo con los captores se inició "en forma muy despectiva y muy violenta" y uno le preguntaba: "Vos sos la de Nine, sos la nuera de Nine?".

"Después me sacaron de ese auto, me pasaron a otro y circulamos por la calle como una hora hasta que escuché como un 'crick' igual al alerta de un Nextel y después el ruido de unas cadenas y unas cortinas", precisó.

Nine rememoró que con la cabeza tapada con un buzo la llevaron a un cuarto, la tiraron en una cama que había en el piso y le ataron el tobillo con una cadena a la pared.

Cuando le volvieron a preguntar quién era, la víctima recordó que les respondió que era "la hermana de Mariano (Nine) y la madre de las nenas" que iban en el auto, dando a entender que los captores no sabían si habían secuestrado a la persona correcta.

"Luego uno me preguntaba por la plata, cuánto facturábamos, cuántos lotes teníamos y yo en ese momento le pedí: 'Señor, por favor sáqueme el buzo de la cara porque me siento mal y ahí me pidió que mejor le eligiera un apodo y yo le puse Tito", contó.

Patricia recordó que entonces le sacaron el buzo, ella preguntó si se iba a ir en el día y su "cuidador", que por entonces usaba la máscara de hombre araña de su cómplice, le dijo: "Esto no es un secuestro express, va durar 30 ó 40 días".

La mujer dijo que entonces se empezó a poner impaciente y, enojada, le preguntó a 'Tito': "¿Ustedes no averiguaron que nosotros tenemos una deuda de 16 millones de pesos en Uruguay? ", a lo que el captor le contestó: "Bueno, ahora van a tener una deuda de dieciséis millones y medio".

Casi en el mismo momento, otro de los secuestradores se comunicaba con su marido y le decía: "Juntá un millón y medio de dólares o te la devolvemos en pedazos".

La víctima dijo que su "cuidador" le contó que la banda la había estado siguiendo desde hacía un mes y le confesó que una semana atrás se les había escapado porque había cambiado su rutina y había salido de su casa una hora antes.

En otro tramo de su declaración, Nine recordó que le hicieron escribir una carta en la que ella tenía que "tranquilizar a la familia" y pedirles que sacaran a la Policía; esa misiva fue encontrada en un kiosco de diarios frente al hospital de Merlo.

Según Patricia, el hombre que la cuidaba un día le llevó un diario para que viera "lo famosa" que era y el día que sintió más miedo fue cuando muy cerca del lugar donde estaba cautiva hubo una fiesta y ella pensó: "Tantos hombres con alcohol, ¿qué me irán a hacer?".

Dijo que pocos días antes de la liberación le explicaron que cuando su familia pagara el rescate, ella tenía que ir a una casa de familia porque seguro la iban a reconocer y no a una remisería o estación de servicio y que en caso de que la Policía llegara antes, ella tenía que tirarse al suelo y gritar que era Patricia.

Finalmente, Nine fue liberada el 23 de octubre por efectivos de la DDI La Matanza tras tirotearse con los dos captores y sin que se pagara rescate. (Télam).