Cherro aseguró a radio América que “lo que gatilla la medida es la devaluación en enero que impactó notablemente sobre los insumos médicos y de otro tipo, y la inflación ha pulverizado nuestros ingresos”.
El empresario afirmó que su sector afrontará “un año muy dificultoso” porque tiene que recomponer “los sueldos de nuestros trabajadores que deberemos actualizar en los próximos meses en paritarias”.
“Con el Gobierno no hay diálogo, por eso llegamos a esta situación. Tenemos que ser responsables y tener un cronograma de actualización de nuestros aranceles. No nos podemos dar el lujo de que este atraso se siga profundizando”, se quejó.
Cherro añadió que “necesitamos recomposición arancelaria para enfrentar nuestros costos” para “mantener las fuentes de trabajo de los cientos de miles de personas que trabajan en nuestras instituciones” que, destacó, “atienden al 75 por ciento de nuestra población”.
Ayer, desde el sector se indicó que el incremento en los costos “supera todas las barreras: en medicamentos más del 90 por ciento; alimentación, lavandería y seguridad 100 por ciento; pólizas de seguro 65 por ciento; y se aproxima una discusión salarial que estaría en el orden del 30 por ciento”.
El último aumento que autorizó la Superintendencia de Salud a las prepagas fue en marzo pasado: aunque se pedía un incremento del 10 por ciento, el gobierno sólo autorizó un ajuste del 5,5 por ciento.