Agregó que el hecho "ya está olvidado, hoy para mí es un día más y me tengo que dedicar a lo mío".
El juicio está a cargo de los magistrados Rómulo Gabriel Peñoñori, Bernardo Mogaburu y María Eugenia Arbeletche y se prevé que se realicen 10 audiencias en las que declararán unos 70 testigos.
Los dos jóvenes están acusados de los delitos de homicidio calificado "criminis causa" en grado de tentativa, por portación de armas de guerra y por el secuestro del dueño del remís que presuntamente robaron y con el que atacaron a Cáceres.
El hecho ocurrió el 1 de noviembre del año pasado, cuando el ex futbolista y una amiga circulaban en su BMW por Ciudadela (partido de Tres de Febrero) y fueron interceptados por otro vehículo del que se bajaron cuatro personas.
Cáceres intentó escapar dando marcha atrás, momento en el cual recibió dos disparos, uno de los cuales le dio en el ojo derecho.
Por el ataque, el jugador, de 41 años, estuvo internado en coma hasta que el 9 de enero pasado fue dado de alta y hoy continúa en rehabilitación.
Por el hecho fueron detenidos otros dos menores, que luego fueron sobreseídos, y un joven de 20 años que no llegó a juicio porque fue apresado en mayo y si situación sigue bajo instrucción.
"Tengo la oportunidad de contarlo y eso es importante", dijo el ex jugador de Independiente, River y la Selección Argentina por Canal 13.
"Mi día empieza muy temprano, tengo pileta y kinesiología", contó sobre su rehabilitación.
Su hija, Fernanda, contó que el objetivo es viajar a Cuba a continuar la rehabilitación y que para eso los está ayudando Diego Maradona.
También sostuvo que su padre pensaba en irse a vivir al exterior antes de que fuera atacado y que "su sueño es seguir con el fútbol, esperemos que lo pueda lograr".
