Estos custodios no podrán portar armas ni trabajar bajo efectos de drogas o alcohol; para incorporarse a la actividad no deberán tener antecedentes penales ni pertenecer a ninguna fuerza de seguridad, estar física y psíquicamente capacitados y, necesariamente, deberán inscribirse en un registro público del personal de contralor, admisión y permanencia de los boliches que los dotará de una credencial identificatoria, además de la obligatoriedad de participar de cursos de capacitación.
Scioli dijo que esta decisión "viene a complementar la aplicación del a Ley de Nocturnidad, que nos permitió avances que se vieron reflejados en las guardias de los hospitales públicos" con un menor requerimiento de servicios.
"Velamos por la calidad del trabajo; por el trabajo en blanco y también por las condiciones de acuerdo a la responsabilidad que la sociedad nos asigna en este tema central, que es cuidar por la vida de quienes son la fuerza de nuestro futuro, los jóvenes", apuntó el gobernador.
Scioli volvió a apelar a la responsabilidad de los padres, al reclamarles "que nos ayuden en la previa, porque el Estado puede hacer muchas cosas, pero no puede meterse en las casas para controlar el consumo de alcohol".
Del acto de puesta en vigencia del Registro, realizado en el Salón Dorado de la gobernación, participaron los ministros de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal, y de Trabajo, Oscar Cuartango; el jefe de la Policía bonaerense, Juan Carlos Paggi; la secretaria de Derechos Humanos provincial, Sara Derotier de Cobacho; el titular del Sindicato Unico de Trabajadores de Control de Admisión y Permanencia de la República Argentina, Leandro Nazarre, y el presidente de la fundación "Martín Castelucci", Oscar Castelucci.