Esta sangre llega al cerebro por medio de dos grandes arterias carótidas ubicadas en la parte delantera del cuello y dos arterias vertebrales más pequeñas ubicadas en la parte trasera del cuello.
Según fuentes médicas, ciertos trastornos de salud pueden producir estrechamientos y asperezas en el interior de las arterias carótidas.
Con el tiempo, estos daños aumentan el riesgo de tener un ataque cerebral o accidente cerebrovascular que se produce más comúnmente cuando las arterias carótidas se obstruyen y el cerebro no recibe suficiente oxígeno.
Kirchner padeció "durante la mañana" un "cuadro clínico causado por una patología de su arteria carótida derecha que requiere tratamiento quirúrgico", informó en un comunicado el médico Marcelo Ballesteros, subdirector Unidad Médica Presidencial.