De esta manera, la jefa del Estado salió también al cruce de las críticas que recibió el oficialismo frente a los trascendidos sobre un nuevo programa que estudiaría la Casa Rosada para pagar un subsidio por hijo a familias de bajos recursos.
En este marco, Fernández de Kirchner deslizó una crítica a esos sectores de la oposición que, dijo, "no tienen nada bueno que contar porque tal vez no hayan hecho buenas cosas".
"Nosotros no nos reunimos para hablar de los demás, no nos reunimos para criticar a los demás, nos reunimos para hacer cosas, para festejar el trabajo y la dignidad", advirtió.
La presidenta habló así durante un discurso que pronunció en el partido bonaerense de Avellaneda al poner en marcha una nueva etapa del plan para incorporar en esta oportunidad a otros 10.000 cooperativistas al programa del ministerio de Desarrollo Social de Ingreso con Trabajo.
"En el mundo de hoy se habla de la destrucción de los trabajos y los trabajos y de las hipotecas que no se pueden pagar", señaló la primer mandataria, por lo cual resaltó la trascendencia del Plan de Ingreso Social con Trabajo porque "constituye un gran desafío, el que todos tenemos que profundizar y que es el modelo de cambio que se inició el 25 de mayo del 2003".
Ya de regreso en la Casa de Gobierno, Cristina Fernández se trasladó hacia la Plaza Colón, ubicada detrás del edificio, para asistir a la apertura del XIII Congreso Mundial Forestal y donde en forma simbólica plantó un árbol.
