El cuerpo de la niña fue encontrado por policías que desde hace cinco días estaban abocados a su búsqueda y que ayer a la mañana encontraron en una laguna el cadáver del sindicado captor de Sofía y asesino de la madre de ésta, Rolando Gaitán Juncos.
Las fuentes informaron que el cadáver de la pequeña fue hallado minutos antes de las 11.30, dentro de un aljibe de un viejo molino que está en un maizal, en el camino entre el barrio Sacchi, donde vivía la víctima, y la zona de canteras de Malagueño, a unos 20 kilómetros de la capital provincial.
Por el momento, los investigadores no dieron detalles de la forma en la que fue asesinada la niña ni de la presunta data de muerte, ya que se aguarda a que el cuerpo sea sometido a la autopsia de rigor para poder responder esos interrogantes.
Los pesquisas presumen que la niña fue asesinada por Gaitán, pareja de su madre quien, según los estudios forenses, se suicidó arrojándose a una laguna desde varios metros de altura, entre 48 y 72 horas antes de ser hallado ayer por la tarde.
Sofía era buscada desde el pasado lunes, cuando la policía encontró asesinada a golpes a su madre, María Alejandra Arias, de 37 años, a metros de su humilde vivienda de barrio Sacchi.
La policía llegó al lugar tras un llamado del propio Gaitán Juncos, quien confesó el crimen y anticipó que iba a matarse en la zona de Malagueño, donde finalmente fue encontrado.
Si bien nadie vio desde ese día a Sofía con Gaitán Juncos, desde el inicio se sospechó que el hombre la había secuestrado.
