El ministro de Salud de la provincia, Claudio Zin, dijo que estos alimentos "no contaban con un sistema de frío adecuado, es decir, se transportaban a temperatura ambiente, lo que genera todo tipo de proliferación de bacterias y un enorme riesgo de que transmitan las llamadas ETA, Enfermedades Transmitidas por Alimentos".
En el procedimiento se incautaron 650 kilos de carne vacuna, 70 kilos de chacinados y 50 de filetes de merluza sin procedencia (no tenían rótulo), que en todos los casos no respetaban la cadena de frío. Además, se secuestraron 94 unidades de ñoquis por 500 gramos, 46 unidades de tapas para empanadas de 453 gramos, 78 unidades de pizzas precocidas de 500, 82 unidades de tapas de pascualina de 390, 620 bolsas de masa precocida para pizza por 443 y 48 unidades de levadura de 50 gramos. La carne no acreditaba procedencia y estaba destinada a pequeños comercios de La Plata, Berisso y Ensenada, y los alimentos fueron posteriormente destruidos, reportó la cartera de Salud.
También se controlaron colectivos de larga distancia verificándose agua y alimentos para el consumo de los pasajeros. El control del catering de micros comenzó a ser incluido en los operativos de Salud luego de que una niña de 13 meses, oriunda de Tierra del Fuego, falleciera por Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) a principios de mes en el hospital José Penna de Bahía Blanca, presumiblemente por haber ingerido alimentos en mal estado durante un viaje en colectivo.
