El episodio, que trascendió esta mañana, se produjo en la víspera en una casa quinta ubicada en las calles Rivadavia y Villa Gesell, en jurisdicción de Pilar.
Dentro de la vivienda se encontraban un hombre de 43 años, su esposa, de 34, y los tres hijos de la pareja: dos chicos de 2 y 4 años y un bebito de seis meses, de acuerdo con lo indicado por un matutino porteño.
Los violentos delincuentes -cuyas identidades no habían sido dadas a conocer- ingresaron por la fuerza a la casa y enseguida amenazaron a los padres de los pequeños con las armas de fuego que tenían en su poder.
En instantes, ataron a todas sus víctimas con precintos plásticos y comenzaron a recorrer las habitaciones de la quinta en busca de dinero y objetos de valor.
Según trascendió, los ladrones lograron alzarse con una suma no precisada de dinero y otros elementos, y los cargaron en el auto de la familia, un Renault 21 color gris.
Dejando a la familia atada dentro de la casa, los ladrones salieron del lugar raudamente, pero fueron interceptados poco después por los integrantes de una patrulla policial del distrito de Pilar, quienes notaron maniobras extrañas.
Así se inició una persecución por las calles de esa zona del norte del Gran Buenos Aires, en la cual los ladrones comenzaron a disparar desde el auto en el que huían contra los policías.
Finalmente, se bajaron del auto e intentaron seguir con la fuga a pie, aunque dos de ellos fueron detenidos a los pocos metros, según se indicó.
El tercer integrante de la banda, en tanto, logró refugiarse aparentemente en un asentamiento y ahora era buscado por integrantes de la Jefatura Distrital de Pilar.