El asesor sobre Asuntos Externos del presidente Luiz Lula Da Silva, Marco Aurelio García, aseguró que "la crisis fue superada y el embajador puede volver", según informó hoy el diario Folha de San Pablo, citado por las agencias de noticias ANSA y DPA.
Lula convocó hace un mes a consultas a su embajador en Quito, Antoninio Marques Pinto, luego de que Correa presentara una demanda ante la Cámara de Comercio de París para no pagar un préstamo otorgado por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), por un valor de 286,8 millones de dólares.
El préstamo había sido otorgado al gobierno ecuatoriano para financiar parte de la construcción de la represa San Francisco, obra realizada por la empresa brasileña Odebrecht, expulsada por Correa por considerarla responsable de las fallas que presentó la central hidroeléctrica cuando se puso en marcha.
Hace dos semanas, el presidente ecuatoriano solicitó a Lula que autorizara el regreso del diplomático y prometió pagar una cuota de la deuda que vence el 29 de diciembre.
García explicó que la decisión brasileña de llamar a consultas a su embajador en Quito fue una reacción a la actitud de Correa de recurrir a una corte internacional para dirimir la controversia.
El funcionario sostuvo que una eventual moratoria de la deuda ecuatoriana, a la que calificó como "episodio ruin", iba a derivar en "una catástrofe para las inversiones" de Brasil en Ecuador, por lo que el gobierno brasileño "tuvo que reaccionar" con el llamado al embajador.
En cuanto a la expulsión de la constructora, que motivó el despido de 3 mil trabajadores de la usina y de otras obras en Ecuador, García sostuvo hay otras empresas "que están queriendo sustituir a Odebrecht" en ese país.