"Ahora tenemos que completar la nacionalización de la Siderúrgica del Orinoco y de las plantas cementeras que pasan de nuevo al pueblo de Venezuela, propiedad social, socialismo", manifestó con tono de victoria bélica, ante sus seguidores.
Esta declaración se produce mientras el gobierno argentino y los empresarios locales se muestran sorprendidos por la inconsulta y lesiva decisión tomada por el régimen socialista que impera en Venezuela.
"Desde aquí mis saludos a los trabajadores de Sidor
, cuenten con nosotros, y contamos con ustedes ahora para convertir a Sidor en una empresa socialista y que la clase obrera asuma protagonismo en la revolución socialista bolivariana", concluyó, en un extenso acto frente a la sede gubernativa.