Tras manifestar la inocencia de su defendido, el letrado dijo que María Marta fue víctima de un homicidio en ocasión de robo y como sospechosos citó a los vigiladores del country, a ladrones externos y al vecino Nicolás Pachelo.
La exposición ante el Tribunal Oral Criminal 6 de San Isidro fue seguida de cerca por gran cantidad de familiares del viudo y por primera vez en el juicio estuvo en la sala la madre de María Marta, Luz Galup Lanús de Hurtig, junto a su hija María Laura y su hijastra Irene, quienes sostienen la inocencia del viudo.
"La nulidad (de la acusación) es expresa e insoslayable", remarcó el letrado en referencia al pedido del fiscal, Diego Molina Pico, para que Carrascosa sea condenado a prisión perpetua.
Molina Pico, dijo, "no precisó el hecho atribuido ni en modo, tiempo y ni lugar", como prevé el Código Procesal Penal.
"Acá, cuando el fiscal habló del homicidio, dijo que Carlos Carrascosa le tiró seis tiros o participó en silencio mientras la mataban otras personas, pero no dice cómo, ni si se fue, o si los dejó a los otros para que limpiaran la escena del crimen. Tampoco describió los roles en forma precisa", señaló.
Molina Pico afirmó que el 27 de octubre de 2002 Carrascosa mató a su esposa en su casa del country Carmel de Pilar junto con Irene Hurtig, hermanastra de la víctima, y Guillermo Bártoli, marido de ésta, y que hubo una "división de tareas", pero no le atribuyó un accionar determinado a cada uno.
"Ese vacío lo llenó leyendo a (Claus) Roxin, pero eso es una cuestión teórica que no tiene que ver con lo probatorio", argumentó Cafetzoglus en referencia al jurista alemán citado por el fiscal para argumentar que hay homicidios que se cometen entre varias personas y no es necesario se[alar una conducta para dictar una condena.
El abogado dio por probado que a la hora del crimen los tres acusados por el fiscal estaban en la casa de Bártoli y que cuando Carrascosa pidió una ambulancia para su mujer lo acompañaban su cuñado y la masajista Beatriz Michelini, que trataban de reanimar a la víctima.
"Si en la casa de María Marta había una conjunción de asesinos siniestros que la torturaron y la asesinaron de la peor manera y necesitaban tiempo para borrar huellas, ¿qué sentido tiene darle paso a la masajista?", preguntó el letrado en forma irónica, en referencia a que Carrascosa autorizó el ingreso de la mujer a la casa poco antes de hallar a María Marta casi sin vida.
Agregó que "si los asesinos mafiosos necesitaban tiempo y privacidad no hubieran permitido el paso de nadie y Carrascosa hubiera tenido tiempo para poner el cuerpo de su mujer en una bolsa, meterla en la camioneta y tirarla de la peor forma, de noche, en un río, con un peso".
"La construcción de los hechos que hace el fiscal es irrazonable, arbitraria y ridícula", destacó el abogado mientras golpeaba la mesa. Molina Pico "quiso sustituir a la masajista por otra persona (Irene) en un pase mágico".
Como el fiscal pidió que en caso de que el tribunal no halle pruebas para condenar a Carrascosa por homicidio, lo haga por encubrimiento, el defensor sostuvo que esta acusación alternativa sólo está prevista para delitos similares como, por ejemplo, el robo y el hurto porque ambos tienen un mismo objetivo: sustraer algo.
"Si lo acusa de coautor de homicidio no puede hablar de encubrimiento porque si el mató no se puede encubrir a sí mismo", afirmó el abogado, quien en tono de advertencia les dijo a los jueces que si Carrascosa es condenado y sus familiares sobreseídos por encubrimiento "habría un escándalo feroz".
Poco antes, el letrado -que dedicó más tiempo a criticar al fiscal que a defender al viudo- acusó a Molina Pico de haber concurrido al velatorio de la víctima, que se realizó en el country Carmel, y de retirarse sin ordenar la autopsia, aún cuando pensara que la mujer había muerto en un accidente, como le dijo ese día toda la familia.
"En caso de muerte violenta, debe hacerse la autopsia antes de la inhumación, incluso con un accidente doméstico. El fiscal ha incurrido en una grave conducta antijurídica que va desde el incumplimiento de los deberes de funcionario público al mal desempeño de las funciones", aseguró.
Y en tono irónico preguntó: "¿El fiscal había ido como fiscal o de visita al velatorio?"
Cafetzoglus recordó que el fiscal ordenó la autopsia "mucho tiempo después" (el resultado se conoció el 2 de diciembre) y recurrió al axioma del francés Edmond Locard, uno de los padres de la criminalística: "El tiempo que pasa es la verdad que huye".
Otro punto que el defensor atacó fue que Molina Pico no dijo en su alegato cuál fue el móvil del crimen y criticó duramente la hipótesis que se planteó cuando el caso fue elevado a juicio: que el crimen había sido cometido por los vínculos de la familia con el Cartel de Juárez.
"Esa metodología de asociación de nombres me suena chapucera y a la que suelen usar los servicios de inteligencia. Me hace acordar a lo que ocurría en el Proceso, que allanaban la casa de un terrorista y todos los que figuraban en la agenda tenían el mismo grado de sospecha, fuera prostituta o Mickey Mouse", subrayó desatando risas en la sala.
Cafetzoglus recordó que el fiscal llegó a ese móvil porque una hermana de Nora Burgués de Taylor, amiga del matrimonio Carrascosa, fue investigada en una causa sobre el Cartel de Juárez que sigue el juez Rodolfo Canicoba Corral.
Pero el abogado remarcó que la hermana fue sobreseída en la causa por narcotráfico y Burgués de Taylor quedó desvinculada del encubrimiento del crimen de García Belsunce en el que estuvo imputada. (Télam)
