Como en una película de ciencia ficción todo desapareció de su lugar. Pero no nos asustemos, las edificaciones no se desintegraron como en el Triangulo de las Bermudas, solamente están cubiertas por la neblina y aunque no se vean, están.
El alerta del Servicio Meteorológico Nacional dice: “las nieblas y neblinas que reducen la visibilidad desde la madrugada de ayer en una amplia región aledaña al Río de la Plata persistirán por lo menos hasta el mediodía del viernes 8 de junio”.
La página del Servicio (www.smn.gov.ar) explica que la neblina es una suspensión de muy pequeñas gotas de agua en el aire, que generalmente reducen la visibilidad horizontal en superficie a más de un kilómetro.
“Es un fenómeno muy parecido a las nubes, con la diferencia de que la neblina está sobre la superficie terrestre, mientras que la base de la nube se encuentra por encima de la superficie”. Si la reducción visual es a menos de un kilómetro se trata de: Niebla.
La humedad reinante ayuda dicen los meteorólogos, y que la hay la hay. El humo y las partículas de sal son las formas más comunes de núcleos de condensación de la atmósfera. “Los núcleos de condensación, suspendidos en el aire, proveen una base en torno a la cual se condensa la humedad”, también se puede leer en la página web del Servicio.
Dicho negro sobre blanco: somos ribereños, es común que el viento nos acompañe constantemente, también hay humedad alta, y además la urbe con su movimiento y la industria provee humo y partículas salinas. La suma de estos tres elementos da como resultado la neblina o la niebla.
Pero a no desesperar. El pronóstico dice que “la noche (de hoy jueves) y las primeras horas de la mañana (del viernes) serán los momentos en los que la niebla genere la mayor reducción de visibilidad”. El fin de semana está salvado. Esperemos que así sea.
Gustavo Camps
Especial para El Comercio On Line
