Mientras que el treinta y seis por ciento de los usuarios decidió cambiar su teléfono en el lapso que va de entre un año a seis meses, actualmente en el país hay más de treinta y tres millones de aparatos alcanzando cerca de dos mil millones de llamadas.
Esta tendencia en alza, según un informe de Carrier y Asociados, seguirá durante el 2007, y esto será por” la baja constante de los precios y el agregado de funcionalidades a los modelos básicos”,
“Los teléfonos celulares se acerquen al concepto de un perecedero, lo que se traduce en una alta tasa de renovación de los mismos”, detalla el documento y agrega que es un fenómeno positivo para la industria y sus fabricantes.
Otra aspecto es que no solo abarca a un segmento social este crecimiento de los móviles sino que comprende a todos los niveles socioeconómicos, por lo tanto el fenómeno no conoce fronteras y ni barreras adquisitivas.
La Consultora sostiene que la renovación es un buen signo ya que al difundirse terminales más modernos, habrá más clientes en condiciones de utilizar servicios que van más allá de la voz y el SMS, como el envío de fotos, descarga de MP3, acceso a Internet y otros servicios de valor agregado que apuntan a ser los impulsores de un aumento del ingreso promedio por línea.
Es muy posible mientras este terminando de leer esta nota e informe sobre los celulares en la Argentina, uno nuevo estará saliendo a la venta con nuevas aplicaciones y, una persona lo estará cambiando por el que está de moda, porque el que tiene lo considera obsoleto.
La tecnología ya no nos pisa los talones de los pies, sino que está dos pasos delante nuestro y nos vuelve unos consumistas insaciables, muchas veces es tanto lo que se ofrece que primero hay que pensar como mejorar el servicio tanto de señal – muchas veces deficiente en algunos sitios – como de atención al usuario, ya que las empresas de telefonía móvil encabezan la lista de quejas de nosotros, los compradores.
Luis Viviant
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