“Yo estoy ingresando al local para hacer la fila y comprar, como cualquier persona normal, y de repente entraron dos guardias de manera prepotente, empujando a la gente, como queriéndose llevar todo por delante. (Cuando) Federico Bal llega a la caja, la gente comienza a reclamar y a quejarse”.
Según el hombre golpeado, las protestas fueron subiendo de tono hasta que estalló la gresca.
“A mí me pegaron el guardaespaldas y amigos de Federico Bal. Hay videos y fotos del hecho. Pasó adentro del local: me atacaron (el) guardia, amigos. Yo caí en el piso y recibo un golpe en la cabeza; de hecho me hice estudios y tengo un traumatismo en el cráneo”, remarco Ruiz.
Por su parte su abogado Carlos Nayi comento que en el marco legal se realiza esta denuncia contra Bal, y no sólo contra su personal de seguridad: “Esta es una actitud bárbara y salvaje que marca un patrón de marcha de Federico Bal, sus guardaespaldas y un grupo de amigos que asumieron una actitud patoteril. Hoy ingresó una denuncia penal que alcanza a Federico Bal, a sus dos guardaespaldas y a amigos que formaban el grupo de visitantes agresivos”.
El letrado indicó que si bien Bal no agredió a su defendido, el equipo de custodios respondía al bailarín por lo que le cabe responsabilidad penal en la causa.
“Él es el que inició un patrón de marcha violento, de provocación, de intimidación, de soberbia, que irrita a los asistentes al local”.
“Estamos hablando de lesiones graves, con desfiguración de rostro, una afectación al nervio óptico, una quebradura de tabique, imposibilidad de ejercer tareas laborales por un mes; algo que conlleva una pena de 1 a 6 años de prisión”, aclaro el abogado.