Tanto el automóvil como la moto recibieron daños de consideración; entre otros, el parabrisas del auto resultó destruido, ya que la cabeza del motociclista impactó contra el mismo.
La secuencia completa del impresionante accidente fue registrada por una de las cámaras de seguridad que el Municipio instaló en las cercanías, monitoreada desde el Centro de Operaciones municipal las 24 horas durante todos los días del año, que envió un alerta inmediata a los servicios de emergencia.
Luego de la sorpresa inicial, se acercaron al lugar vecinos para auxiliar al caído, que yacía inconsciente; a los pocos minutos, llegaron una ambulancia de Emergencias San Fernando junto a un móvil policial, quienes se hicieron cargo de la situación, brindando los primeros auxilios y preparando al herido para su traslado al Hospital, donde quedó internado a raíz de sus heridas.
Cabe destacar que -violando las leyes de tránsito y poniendo en grave riesgo su vida- el motociclista no llevaba el casco puesto en la cabeza, sino en el codo. Si el choque hubiera sido contra un vehículo de gran porte o caído sobre el pavimento, habría sufrido heridas aun más graves, o fallecido en el acto.
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