Tras una extensa discusión se acordó encarar “en el más breve plazo” algunos aspectos, como “un efectivo y serio estudio de los balances y estructura de costos de las empresas” que permita “determinar un razonable valor en los pasajes, acorde con las necesidades y capacidades” de la población isleña, indica el texto.
También convinieron “mejorar el control de los ingresos reales de las empresas” a través de la tarjeta SUBE, que la Compañía Interisleña rehabilite el servicio que brindaba a las 23.30 y ver la posibilidad de aumentar el subsidio al combustible para esta modalidad de transporte.
“Nada eso sucedió, nunca más atendieron los teléfonos y el 1 de enero nos desayunamos con una aumento del boleto mínimo” a 15 pesos, “para recorrer no más de 4 kilómetros en lanchas del año 1930”, mientras que “el subte en Buenos Aires sale 5 pesos y el colectivo en Capital y Gran Buenos Aires 3 pesos”, compararon.
La comunidad isleña dijo sentirse “agraviada” por autoridades bonaerenses, los empresarios y el municipio de Tigre y reclamó que no se efectivice el aumento del boleto, la “urgente” reposición de la lancha de las 23.30 en el corredor Sarmiento-Capitán y “la renovación de la flota vetusta” con la “los empresarios monopólicos” brindan el servicio de transporte fluvial en Tigre.
María Eugenia Fernández Romero, quien vive en la zona de islas en el río Capitán, dijo que el reclamo comenzó “entre el 2007 y el 2008, por ese entonces con la Secretaría de Transporte bonaerense, que hoy es la Agencia Provincial de Transporte, que autoriza los aumentos de tarifa de las lanchas”.
“En estos años ya pasamos por cuatro titulares del área, volviendo en cada caso a plantear nuevamente todo el tema y la última vez lo hicimos en agosto pasado”, señaló la pobladora isleña y remarcó que el boleto mínimo de 15 pesos es sólo para residentes en el primer tramo de la primera sección, de las tres que tiene el sistema.