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Director de ARBA salió al cruce del informe de CEPAL Y aseguró que el esquema impositivo bonaerense es “progresivo, progresista y racional”

El titular de ARBA, Ivan Budassi
El Director ejecutivo de la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA), Ivan Budassi, dijo que la presión tributaria que ejerce la provincia “no le cambia la ecuación a nadie”, y que “claramente, el impuesto inmobiliario urbano que cobran muchos municipios, por ejemplo, es dos o tres veces más alto que el que exige ARBA”.
El titular de ARBA, Ivan Budassi, indicó que “la provincia de Buenos Aires tiene un esquema tributario progresivo, progresista y bastante racional, y si hay algún problema impositivo, eso no lo genera la provincia. En eso yo me quedo tranquilo”, afirmó. Dijo también que la autarquía que le brindó a ARBA el Gobernador Daniel Scioli, le permitió a la impositiva bonaerense tener una fuente propia de financiamiento y poder capacitar a personal en los Estados Unidos, Canadá y Europa.

Budassi salió así al cruce de un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), según el cual la Argentina es el país con más alta presión tributaria de toda Latinoamérica. Según el documento dado a conocer ayer en Santiago de Chile por el organismo de las Naciones Unidas, bajo el título “Estadísticas tributarias en América Latina 1990-2012”, La presión tributaria es encabezada por Argentina (37,3%) y Brasil (36,3%), niveles que están por encima del promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

El funcionario formuló declaraciones durante la emisión del programa “Fuentes Confiables” que se difunde de lunes a viernes de 9 a 12 horas por AM 1540 Radio Líder, conducido por el periodista Alfredo Goijman. Durante la entrevista, Budassi se refirió a la tarea que está desarrollando ARBA en la Costa Atlántica.

En ese sentido, Budassi consideró que “no hay ningún justificativo para el trabajo en negro. No es muy complejo cumplir con la ley en este sentido”.

Dijo así que para los trabajadores “existe un régimen especial que es la del trabajador de temporada que no genera relación de dependencia, y entonces no hay excusas para tenerlo en negro y no brindarle la mínima protección de una ART o de una obra social durante la temporada. Y en realidad para las otras obligaciones tributarias, el empresario tampoco debiera tener inconveniente: inscribirse como monotributista o como responsable inscripto, ni siquiera requiere un contador. Es el simple compromiso del comerciante de cumplir con sus obligaciones mínimas. Es inscribirse y dar una factura”, puntualizó.

Por otra parte, el titular de ARBA fue consultado acerca del informe de CEPAL aparecido ayer, acerca de los países de América Latina con mayor presión tributaria, ranking que encabeza según el organismo de la ONU, la Argentina.

Si bien consideró Budassi que “cuanto mayor es la presión fiscal, mayor es el incentivo a evadir”, el titular de la impositiva bonaerense enfatizó no obstante que “yo me siento tranquilo, porque la presión tributaria que ejerce la Provincia de Buenos Aires, no le cambia la ecuación económica ni de vida al contribuyente bonaerense”.

Pidió entonces que se compare lo que cobra la provincia de Buenos Aires en concepto de impuesto inmobiliario urbano, y lo que cobra cualquier municipio, y aseguró que “claramente están entre dos y tres veces lo que cobra la provincia”.

“Además –dijo Budassi-, de siete millones de partidas inmobiliarias urbanas, la provincia exime a un millón de personas que son jubilados, que cobran hasta dos veces la mínima, o gente discapacitada, o casas de bajo valor fiscal”.

Y agregó: “En eso yo me quedo tranquilo, que la provincia de buenos aires tiene un esquema tributario progresivo, progresista y bastante racional, y si hay algún problema tributario ese no lo genera la provincia”.

Dijo también en cuanto al inmobiliario rural, que “los mismos productores reconocen que su problemática no está vinculada en modo alguno con lo que le cobra la provincia”, enfatizó.

Paradores “en el más allá”
El titular de ARBA, oriundo de Bahía Blanca, manifestó por otra parte su “asombro” por la cantidad de lugares de veraneo en la costa atlántica, en algunos casos inaccesibles para el común de la gente, a los que “solo se accede con camionetas 4X4 y cuatriciclos”.

“Nosotros hicimos lo mismo: alquilamos algunos cuatriciclos vetustos y llegamos a balnearios y paradores adonde nunca había llegado impositiva. Y nos miraban raro. Había una 4X4 al lado de la otra y toda una parafernalia con un despliegue con motos de agua, cuatriciclos carrozados para cuatro personas, muy lindos y que cuestan como 30.000 dólares”.

Y amplió: “Y también vimos paradores muy alejados, con nombres esotéricos, como del más allá, que como nunca vino nadie tampoco estaban acostumbrados a que los visitaran del más acá”, expresó irónico.

Dijo así que en los operativos realizados en forma conjunta con AFIP durante los primeros 20 días del 2014, se registraron unos 1.600 empleados “en negro”, y confirmó también que merced a un novedoso mapeo satelital infrarrojo adquirido a la NASA estadounidense, se logró detectar construcciones en zonas exclusivas de Pinamar y Cariló, con más de 1,5 millón de metros cuadrados construidos sin declarar. “La corroboración in situ nos dio resultados al milímetro, sin margen de error”, remarcó Budassi.

“Eran más de un millón y medio de metros cuadrados que como figuraban como baldío, no pagaban tributación a la provincia de Buenos Aires”, subrayó.

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