Sin dejar espacio llegó “Antes y después” para continuar con “El Viejo” de Pappo. Antes de la primera pausa vino “Arco” desde el álbum “Ay, Ay, Ay, luego Ciro agradeció al público por dos nuevos Lunas tras los tres de septiembre.
Con la gente cantando “vamos Los Piojos” llegó el primer clásico de la banda de El Palomar: “Amores perros”, para retomar la senda de “Espejos” y antes de los primero acordes Ciro dijo que “este tema va dedicada para una de las bandas más grandes” y se disparó “Malambo para Luca”.
Luego sacudieron con rock and blues al templo del box con “Blues del gato sarnoso”, “Rockabilly para siempre” y “Vas a bailar”. De elegante smoking-rockero sonó “Servidor” que relata las idas y venidas del amor en “puedo ser tu más seguro servidor, y después el culpable del mal”.
Para tramo final del recital la alegre y saltarina “Chucu chu” y la noche se fue bluseada con “Noche es hoy” para decir adiós con “Trapos” en la que Ciro leyó cada una de las banderas que decía de donde venía la gente.
Hubo ambiente de rock, de blues y de ritual. Ciro esta iniciando un nuevo camino que en su primer año como solista reveló con alegría luego del último acorde en el Luna: “Gracias por venir y por el apoyo, este fue un año inmejorable”.
Luis Viviant
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