La agenda presidencial de mañana, además de su participación en las deliberaciones de la Cumbre, incluye reuniones bilaterales -aunque todavía no confirmadas- con los mandatarios de Grecia e Irlanda, dos de las naciones más afectadas por la crisis europea, y de Bélgica y Dinamarca.
Fernández de Kirchner es actualmente presidenta pro témpore del MERCOSUR y del bloque América Latina y el Caribe.
En el mensaje en el Palacio Real de Madrid, la jefa del Estado se refirió a la crisis global al recordar que en el mundo "estamos pasando momentos difíciles" y en este sentido advirtió que "se han derrumbado las verdades que no eran verdades y el reino del pensamiento único, por lo que tenemos nuevos desafíos por delante".
Tomó entonces conceptos pronunciados por el Príncipe Felipe, quien -en representación del rey Juan Carlos convaleciente de una intervención quirúrgica la precedió en el uso de la palabra- para resaltar que es necesario "redefinir reglas y redefinir comportamientos y actitudes y políticas de parte de cada uno de nosotros".
En este marco, Fernández de Kirchner reivindicó a la política sobre la economía que no es, aclaró "renegar del mercado, sino simplemente darle una dimensión humana de intervención del Estado y de necesidad de nuevas regulaciones para poder afrontar y superar esta crisis".
La actividad oficial de mañana comenzará a las cuatro de la mañana, hora argentina, cuando el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, a cargo también de la presidencia de la UE, reciba a sus pares y quede oficialmente inaugurada la VI Cumbre.
Los mandatarios europeos y de América Latina y el Caribe deliberarán hasta el mediodía madrileño y luego del almuerzo se realizará la sesión de clausura del encuentro y la conferencia de prensa para dar a conocer las conclusiones.
El miércoles a la mañana, la presidenta se trasladará a la ciudad de Barcelona donde mantendrá un encuentro con empresarios locales.
