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Megadeth vibró junto a su público argentino al ritmo del trash metal

Megadeth revalidó con su nueva presentación en el porteño estadio Luna Park su idilio con el público argentino
Megadeth revalidó con su nueva presentación en el porteño estadio Luna Park su idilio con el público argentino. Con entradas agotadas hace varias semanas la banda californiana presentó canciones de su último álbum "Endgame" y celebró el aniversario número veinte de la edición de su más grande obra: "Rust in peace".
Con un significativo retraso, debido a la tardía llegada al país de los equipos de la banda (comenzó a las 22.05 de la noche del miércoles y estaba pactado 20.30), cuando se apagaron las luces fueron apareciendo de a uno en el escenario los músicos: primero el baterista Shawn Drover con casaca de la Selección Argentina, luego el guitarrista Chris Broderick, después el bajista orginal de la banda David Ellefson y, finalmente, y haciendo gala de su liderazgo, el cantante, guitarrista y fundador de Megadeth Dave Mustaine.

Abrieron con la instrumental "Dialectic Chaos", y pegadas vinieron "This Day We Fight!" y "In My Darkest Hour". Luego, ante la primera ovación del público, Mustaine, vestido de camisa blanca y jeans azules, saludó con la mano desde el centro y hacia todos los rincones del estadio para después tomar el micrófono y decir en español "Muchísimas gracias chicos", y continuó en inglés "esta es una gran noche, ¿no? vamos a tocar 'Rust in Peace'", e inmediatamente dio paso a "Holy Wars... The Punishment Due" y "Hangar 18".

Luego, el show sufrió una interrupción de unos cinco minutos con la banda saliendo del escenario. En medio de la espera, Mustaine volvió al micrófono a explicar que estaban sufriendo algunos problemas, pero los iban a arreglar y, así, podrían continuar. Una vez con toda la banda arriba del escenario continuaron con "Take No Prisoners", "Five Magics", "Poison Was the Cure", "Lucretia", "Tornado of Souls", "Dawn Patrol" y "Rust in Peace... Polaris".

Tras un breve intervalo y ante la batería de cánticos futboleros desplegada por el público, "el colorado" Mustaine reapareció en el escenario para dirigirse una vez más a la concurrencia. "Ustedes son la mejor audiencia de todo el fucking planeta, ayúdenme a cantar esta". Y así llegó "Headcrusher". Luego, fue el otro miembro original recién retornado a la banda Dave Ellefson quien saludó. "Hola Argentina, qué bueno es estar de vuelta con ustedes", dijo, y presentó "The Right to Go Insane".

Para el cierre llegaron "A Tout Le Monde" y "Symphony Of Destruction" con el ya clásico y mundialmente famoso cántico "Megadeth, aguante Megadeth". Para los bises y con Mustaine ya con el toso desnudo llegó "Trust", interpretado en español en la última parte, y, finalmente, "Peace Sells".

El concierto finalizó a las 23.50 con la banda despidiéndose de los presentes tomados de la mano, en saludo teatral. Mustaine se quedó solo y se despidió visiblemente emocionado ante la fidelidad y el cariño de un público que coreó y saltó en cada una de las canciones. "Muchísimas gracias, Dios los bendiga, son grandiosos, nos vemos pronto", dijo, para despedirse.

Haciendo gala de su oficio Megadeth sacó adelante un show que padeció de algunas dificultades técnicas. Pero la pasión de "el colorado" y su troupe por lo que hacen, más el fervor del público, dejó en el olvido, al concluir el recital, cualquier desperfecto ajeno a lo musical.

La gira de Megadeth ya pasó por Brasil y continuará en varios países de Centro y Sudamérica, para terminar en el verano europeo tocando junto a Metallica, Slayer y Anthrax en el festival Sonisphere, donde por primera vez en más de dos décadas los cuatro grandes del thrash metal se reunirán en un escenario. (Reporter)

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