La esposa de Sandro confesó atravesar el momento "más doloroso de su vida" pero dijo no querer "dejar de hacer llegar" su "agradecimiento a todos aquellos que movidos por el respeto y el amor que generaba mi esposo no dudaron en prestarme su total apoyo".
La viuda agradeció "a quienes desde hace tanto tiempo lucharon por mantenerlo vivo, los doctores Juan Antonio Mazzei y Sergio Perrone, y el fisioterapeuta Ivan Guevara, a los que se sumó luego el doctor Claudio Burgos y su equipo".
"No puedo olvidar a todo el personal del Hospital Italiano de Mendoza, desde sus profesionales médicos hasta el personal de seguridad, pasando por enfermeros, anestesistas y kinesiólogos", recordó.
También dijo estar agradecida por "la preocupación y la ayuda que en absoluta privacidad nos brindaron la presidente de la Nación, Cristina Kirchner, el jefe de gabinete, Aníbal Fernández (que todos los días llamaba personalmente para interesarse por la salud de mi esposo y que resolvió no pocos problemas operativos) y al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli".
Cuando se refirió al periodismo, destacó el "respeto y la perseverancia con los que algunos lo hicieron" aunque mencionó "excepciones que prefiero olvidar, aunque ocasionaron mucho daño".