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Fito Páez íntimo y brillante en el Opera

Fito Páez íntimo y brillante en el Opera
Presentó el pasado viernes su nuevo disco “Rodolfo”. Desplegó junto a invitados un concierto sólido con el piano, en que también repaso sus canciones más exitosas. Agregó dos nuevas funciones para el 19 y 20 de noviembre.
Expectativa y ansiedad se percibía en los espectadores que colmaron las butacas del teatro Opera. Habían pasado dos años de su última presentación en Buenos Aires cuando lo hizo con el disco “Moda y Pueblo” junto a Gerardo Gandini, y éste regreso de Fito Páez fue para presentar su nuevo trabajo “Rodolfo” de forma elegante, simple e impecable.

De traje negro y remera blanca el rosarino hizo su aparición y sin mediar palabra se sentó frente al piano, que estaba en el centro del escenario, y comenzó con los acordes de “Waltz for marguie” seguido de “Si es amor”, canciones de su último álbum.

El show estuvo impregnado por el aura de “Rodolfo” que se acentuó en “Sofí fue una nena de papá” y “Vas conmigo”, pero sin dejar de lado los temas exitosos que se renovaron con su versión de piano en “Hay algo en el mundo”, “Dos días en la vida” y “11 y 6” donde Páez como un maestro de ceremonia dejó al público vibrar en su propio canto y hacer una delicia de canción. “Vieron que hermoso cuando podemos cantar todos”, dijo Fito luego de una prolongada ovación de las tantas que recibió a lo largo de la noche.

También se subió al escenario Coki Debernardi, quien acompaño en guitarra y voz en los temas “Desaparecer” y “Taquicardia” realizando una performance de alto vuelo musical en el que la guitarra y el piano se fundieron en uno.

Con un decorado simple en la que las canciones eran cortejadas por imágenes que se proyectaban en una gran pantalla y acompañado por un delicado y sutil juego de luces, prosiguió con “El cuarto de al lado” y “Una noche en Okinawa”.

Tras “Mágica hermosura”, Fito abandonó por un momento el piano se calzó la guitarra e interpretó una potente y eléctrica versión de “Ciudad de pobres corazones”.

Luego junto a la cantante Liliana Herrero interpretaron “Dale alegría a mi corazón”, después Carlos Vandera y Gonzalo Aloras pusieron sus voces en “La rueda mágica”, que dio paso a “Polaroid de locura ordinaria”.

El final se acercaba y llegó “Gracias”, homenaje de Paéz a Luis Alberto Spinetta, Litto Nebbia y Charly García por la influencia que tuvieron estos tres músicos sobre él. Los bises obligatorios a pedido de la gente condujeron a “Zamba del cielo” y junto a los invitados “La buena estrella” que produjo el adiós.

“Tengo 44 años, hice tanta música y disfrutarlo con ustedes es mágico”, se confesó un Fito Páez al que se lo vio feliz, radiante y sólido ante un público que le restituyó con afecto y cariño cada melodía que ofreció.

Nuevas Funciones

Para aquellos que se quedaron afuera de las prestaciones del 5, 6 y 7 de octubre, Fito Páez agregó dos nuevas funciones los días 19 y 20 de noviembre en el Teatro Opera.

Luis Viviant
luisv@elcomercioonline.com.ar

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