"No tengo duda alguna de que ella fue robada por alguien de la habitación. No sabemos si fue una persona, dos o un grupo, pero lo cierto es que la robaron", agregó.
El cardiólogo del pueblo de Rothley, en el condado inglés de Licestershire, admitió, sin embargo, que se siente frustrado por la falta de información por parte de la Policía portuguesa.
"Esta situación nos hace enojar. Son sentimientos normales que a veces nos hace explotar", continuó.
La pareja asistió ayer a una misa en la iglesia católica de Nossa Senhora da Luz, la capilla de Praia da Luz, el pueblo portugués donde desapareció Madeleine.(Télam).-