La tercera gala de expulsión tuvo numerosos romances y momentos de alto voltaje entre los participantes. Primero fue con la "fiesta hot" del sábado, en la que Eugenia y Esteban se besaron apasionadamente. Y aunque Mariana intentó seducir al participante, Eugenia lo "rescató" de las garras de la relacionista pública.
Después fue el momento de la pareja de Javi y Florencia, formada hace un par de semanas, que se besó desenfrenadamente en el SUM y, más tarde, adentro del baño.
Por otro lado, Cinthia se cuestionó la naturaleza de su relación con Juan Emilio, tras su fugaz romance y ruptura de la semana anterior.
Pero los que acapararon la atención fueron Alan y Soledad, quienes se manosearon en el living, cubiertos por una frazada, ante la atónita mirada de sus compañeros.
"Pobre mi chico, es horrible, pobre", dijo la joven, al darse cuenta de que su novio descubriría por televisión que ella ya había encontrado un nuevo compañero. Aunque agregó, en tono cómplice con Alan: "en mi casa van a estar contentos porque odian a mi novio".
Los otros participantes se dedicaron a comentar, divertidos, acerca de lo que estaban viendo. "La está 'paqueteando'", dijo Juan Simón. "Me da lástima el novio", comentó Andrea.
Más tarde, Sole arrancó las fotos de su ahora ex novio de la pared, mientras Alan festejaba la conquista con sus compañeros. Pero lo más fuerte vino después, cuando los tortolitos sellaron su relación con audaces caricias en la cama, bajo las sábanas. (Reporter)