El fiscal del caso Belsunce respondió con un nuevo escrito que entonces necesitaba la ayuda de los otros tres colegas que Novo le impuso como compañeros en el juicio: John Broyad, Ariel Apolo y Diego Grau.
Fuentes judiciales contaron a Télam que como sucedió en el juicio, cuando discutieron frente al tribunal o ni se dirigían la palabra, el escrito de Molina Pico fue bastante despectivo con sus tres colegas ya que en vez de llamarlos por sus cargos y nombres pidió que se convoque "a quienes presenciaron el juicio".
Incluso, Molina Pico también pidió la ayuda de Jorge Alvarez, el secretario que en el juicio colaboró con Broyad, Apolo y Grau, diciendo en el escrito que "desconocía su función y jerarquía".
Si bien una fuente judicial había dicho a Télam que Alvarez era sobrino del fiscal general Novo, el fiscal Broyad negó esa relación de parentezco y aclaró que es su secretario en la UFI 1 de Vicente López.
Incluso, Molina Pico también pidió la ayuda de Jorge Alvarez, el secretario que en el juicio colaboró con Broyad, Apolo y Grau, y además sobrino del fiscal general Novo, diciendo en el escrito que "desconocía su función y jerarquía".
En razón de ello, Novo resolvió que ninguno de los fiscales tuviera vacaciones y se quedaran trabajando en el recurso de Casación y en la extracción de fotocopias de la causa para hacer las denuncias que correspondan, confiaron voceros judiciales.
Lo que nadie sabía es que Molina Pico ya tenía prácticamente redactado el recurso de Casación y que lo iba a presentar un día
antes de iniciar sus vacaciones, agregaron las fuentes.