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Comienza el plan de entrega voluntaria y anónima de armas de fuego

Comienza el plan de entrega voluntaria y anónima de armas de fuego
El plan nacional de entrega voluntaria y anónima de armas de fuego y municiones a cambio de un incentivo económico comenzó hoy en todo el país con el objetivo de reducir el circulante de armas en manos de civiles y evitar la tenencia ilegal, los accidentes y las situaciones de violencia.
Con el lanzamiento realizado hoy en la localidad bonaerense de Necochea por el director del Registro Nacional de Armas (RENAR), Andrés Meiszner, quedaron habilitadas lugares fijos de recepción de armas y municiones en la Capital Federal y en la mayoría de las provincias, y un teléfono para dar información a los interesados.

A media mañana de hoy ya habían llamado decenas de personas al 0800-33372763, según confirmaron a Télam operadores de esa línea.

Las provincias que tienen delegaciones del RENAR donde se reciben las armas y municiones son Buenos Aires, Chaco, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Jujuy, Mendoza, Río Negro, Salta, Santa Fe, Tierra del Fuego y Tucumán.

También se podrá acceder a las sedes del Tiro Federal Argentino, el Tiro Federal de Lomas de Zamora y la Asociación de Tiro y Gimnasia de Quilmes, en tanto en las provincias que no tienen delegaciones se confeccionará un cronograma de bocas

móviles que el organismo informará en el momento de su implementación.

El RENAR informó que la entrega voluntaria de armas puede realizarla toda persona que lo desee, tenga o no credencial de Legítimo Usuario, y las armas pueden ser de cualquier calibre y tipo, estén o no registradas.

Pueden entregarse escopetas, revólveres, pistolas, carabinas, fusiles, pistolones y sus municiones.

La entrega es anónima y voluntaria y no se exigirá presentación de documento de identidad, ni para dejar el arma ni para el cobro del cheque.

Asimismo, la entrega de armas y municiones durante el período de ejecución del programa, de 6 meses con opción a otros 6 meses más, no traerá ninguna consecuencia legal para las personas que la efectúen, sean estos usuarios o no y sus armas estuvieren registradas o no.

El plan significa que toda persona que entregue un arma quedará amnistiado, es decir, exceptuado de cargos por la figura de tenencia ilegal de armas de fuego de uso civil y de guerra previstos en el Código Penal.

Los receptores "tomarán el número de serie del arma y marca, tipo y calibre con el fin de cotejar estos datos con los registros existentes y a fin de realizar un informe final de carácter público en el que conste el detalle de los materiales entregados y destruidos" según el artículo 11 de la ley 26.216.

En cuanto a los menores de edad que deseen entregar un arma, lo podrán hacer pero acompañados por un mayor responsable.

Los incentivos monetarios, que "pretende recompensar -destacó el RENAR- a aquellos ciudadanos que, conscientes de los peligros que entrañan la posesión de armas, las entregan con el solo fin de contribuir a la disminución de la violencia y a la construcción de una sociedad más pacífica", oscila entre 100 y 450 pesos.

La entrega de incentivos se enmarca dentro del objetivo del Estado de asumir "como política pública la necesidad de disminuir la violencia armada producto de la proliferación de armas de fuego tanto en el mercado legal como en el ilegal", señaló el organismo nacional.

El RENAR precisó que el pago del incentivo se efectuará a través de la entrega de cheques del Banco Nación al portador y podrá ser cobrado en cualquiera de sus sucursales y sin identificación personal.

Se recomendó que las personas que entreguen armas deberán transportarlas descargadas, en sus fundas, en bolsos, envoltorios o cajas, disimulando el contenido y separadas de su munición.

No obstante, existe la posibilidad de que el RENAR retire armas del domicilio sólo cuando éstas sean de extrema peligrosidad y constituya un riesgo su traslado, o cuando la persona que desea entregar el arma se encuentre imposibilitada físicamente para trasladarse.

Las armas, una vez entregadas, serán inutilizadas en los puestos de recepción por el personal especializado y finalmente destruidas. (Télam)

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