Y justamente, el GH recién empieza y con los catorce participantes recién ingresados la nominación se puso en marcha. Fue para destacar la primera entrada al confesionario: Nino Dolce, que entró al en compañía de Cosmo y Chongo, dos muñecos extraterrestres de plástico, que lo “aconsejaron” sobre a quién nominar.
Pero como siempre en el formato Gran Hermano, hubo un repaso de las situaciones más destacables de la semana. Una de ellas fue a partir del cruce de “famosos”, que da como resultado algunos momentos insólitos. Así, María Fernanda Neil reveló sorpresivamente que era fan de Hernán Caire, que en una época fue parte del elenco de “Jugate conmigo”. Y para asegurar su fanatismo cantó un viejo tema de la producción de Cris Morena. Sin embargo, Caire, a la hora de nominar, no tuvo contemplaciones y votó por su admiradora.
A las 22.15 fue la primera comunicación con la casa. La histriónica Mariana Otero contó que había ido demasiado lejos con sus bromas (simuló que era viuda), aunque no se privó de criticar a Amalia Granata, que sigue sin poder integrarse al grupo.
Por supuesto, la producción del programa se encargó de mostrar el posible romance en progreso entre Hernán Caire y Lissa Vera. Después de algunas charlas íntimas, la ex “Bandana” le dijo a Cintia Fernández: “El chabón me descolocó, me lo como al horno con papas”. Y después, con los consejos de su confidente, concluyó: “Lo tengo que apurar”.
Con una modelo en la casa, también hubo un desfile de Dolores Moreno -en tanga- , Lissa Vera -mini- y Cintia Fernández -camisón y colitas en el pelo- en plan “Lolita”, y finalmente Marisa Otero, con un sobrio solero.
