Entre las principales medidas, se destacan: declarar “Zona de Desastre económico, social y productivo” por el término de 180 días, prorrogables por igual término por el Poder Ejecutivo Nacional, a las localidades afectadas por las recientes inundaciones en las provincias de Santa Fe, Corrientes, Santiago del Estero, Chaco y Entre Ríos; la suspensión de embargos y ejecuciones de AFIP a todos los afectados; subsidios para familias y productores damnificados por el impacto en sus trabajos y producciones; y duplicación de jubilaciones, asignaciones familiares en las regiones afectadas para sostener consumo y ayudar afectados, como históricamente hizo ANSES.
Además, el proyecto exige la definición de un Plan Hídrico Nacional y de emergencia de las zonas recurrentes de desastre, con sus respectivos presupuestos medio ambientales, y la actualización del Fondo de Emergencia para Infraestructura Hídrica, congelado hace 3 años.
En los últimos días, Sergio Massa mantuvo contacto con los gobernadores Domingo Peppo (Chaco), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Miguel Lifschitz (Santa Fe) y Gustavo Bordet (Entre Ríos), a quienes les informó su total disposición, como la de sus equipos técnicos.