“¿Por qué no lo empezaron a buscar por abajo? Están buscando un submarino, no un barco”, dijo Horacio Ibáñez, hermano de uno de los tripulantes, que además comentó: “No voy a ser optimista sabiendo de qué labura. Entiendo que es una profesión de riesgo”.
Ante la prensa, el hombre se mostró desesperanzado y expresó que para él, el submarino está “desde un principio en el fondo del mar” y que cree que está en “el lugar en el que se perdió la comunicación”.
“¿Y si el submarino está más abajo de lo que dicen y ellos suponen que tiene que estar arriba? Acá no hay medios para buscarlo abajo”, sentenció.
En tanto, Lourdes Ledesma, esposa de uno de los tripulantes, al referirse a las versiones que indicaban que el submarino salió al mar y no estaba en condiciones, explicó que “hay gente que se pone muy nerviosa, pero realmente la familia naval, los que conocen a los submarinistas y conocen el submarino, saben que ha salido en perfectas condiciones”.
Ledesma contó además que en la Base Naval de Mar del Plata las familias están unidas y que los compañeros de su esposo de la Armada están “destrozados”.
“Hay que confiar, tener fe y rezar”, indicó la mujer, que comentó que su marido estuvo dos veces en Haití, con huracanes, y que estuvieron una semana y media sin comunicarse, y que además viajó a la Antártida, donde comunicarse no es tan fácil.