Gendarmería había logrado liberar un carril, mano a Capital Federal, pero luego los militantes intentaron bloquearlo una vez más y fue entonces cuando los uniformados avanzaron contra los manifestantes, incluso con camiones hidrantes y gas pimienta, lo que generó la reacción de los piqueteros.
Los militantes atacaron a los gendarmes con objetos contundentes y con los palos que utilizaban como astas de sus banderas, en tanto los agentes lograron detener a varios de los manifestantes, que contaban con el respaldo en el lugar de dirigentes de agrupaciones de izquierda.
Más temprano, las partes habían consensuado liberar parcialmente el bloqueo, lo que se concretó, pero a las 9.25 se produjeron incidentes cuando los militantes volvieron a interrumpir el tránsito.
A las 9.40, los manifestantes continuaban caminando sobre la Panamericana, en la localidad de El Talar, pese a que los gendarmes arrojaban agua desde carros hidrantes, y la autovía permanecía cortada de manera total en ambos sentidos.