“Esta escuela recibió el año pasado una obra de la Unidad Ejecutora Provincial, para independizar su entrada; para esto, el Consejo Escolar cedió una casa habitación que se utilizaba como depósito, para que la escuela pudiera crecer, tenga su independencia y deje de compartir los baños con la escuela primaria, que era lo que más necesitaba”, expresó González.
Y agregó: “La obra se desarrolló durante el año pasado, con cierta lentitud. En el verano, durante el mes de enero la empresa no estuvo presente; no hubo nadie. Regresó a mediados de febrero, empezó a hacer cosas y hoy nos encontramos con que la obra está paralizada a apenas una semana del inicio del ciclo lectivo de la secundaria. La empresa se fue, dejó todo y no sabemos qué va a pasar, porque tampoco tenemos información de la Unidad Ejecutora Provincial que tenía a cargo la obra, y cómo seguimos adelante con esto”.
En esta situación, ambas escuelas no pueden empezar las clases, porque a lo largo de toda la edificación hay una obra a medias y no está en condiciones ni de seguridad ni de limpieza; es un edificio que está en uso, pero no en condiciones para recibir a los alumnos.
“A la Unidad Ejecutora y a la Provincia le pedimos una respuesta concreta: que es lo que ocurrió, por qué la empresa no está cuando se habían comprometido a que los baños iban a estar terminados al inicio del ciclo lectivo, que el tiempo de terminación para la entrada independiente y la puesta a punto del ascensor eran unos pocos días, y garantizaban que los baños iban a estar a pleno para ser usados. Queremos saber, porque no hay respuesta oficial; nadie nos atiende ni nos contesta, y estamos muy preocupados porque así la Secundaria 11 y la Primaria 36 que comparten edificio no van a poder empezar”, finalizó González.