El fiscal Carlos Matheu imputó a 10 cordobeses y a una mujer oriunda de Estados Unidos por los delitos contra el ambiente, de los cuales tres tienen penas dolosas y los restantes ocho culposas.
"Los vehículos arrojaban humo negro que contaminaban la atmósfera y ponían en riesgo a las personas que se encontraban expuestas a esa contaminación, lo cual es peligroso para la salud humana, ocasionando afecciones pulmonares y cardiovasculares", manifestó Matheu en declaraciones a Cba24n.
El funcionario judicial adjudicó los cargos a “un obrar negligente" y destacó que algunos de esos automóviles "ya pasaron por la Inspección Técnica Vehicular (ITV) y fueron advertidos por lo elevado de la contaminación, no pusieron el vehículo en condiciones y han seguido circulando por lo que se les atribuyó un accionar doloso".
El ITV es la Inspección Técnica Vehicular que exige la Municipalidad de Córdoba a los vehículos con una antigüedad mayor a dos años, control que debe realizarse en los autos particulares una vez al año para obtener la habilitación y poder circular.
El delito que se les atribuye a los imputados es 'contaminación ambiental', previsto en la Ley de Residuos Peligrosos, y para el delito 'doloso' la pena va de tres a 10 años de prisión, y en la forma culposa la pena es de dos años de prisión.
Matheu había comenzado las investigaciones en octubre del año pasado, momento en el que advirtió que estos gases en determinadas horas de la mañana "no pueden desplazarse hacia arriba", con lo cual las personas deben "aspirar involuntariamente estos tóxicos".
“Los motores diesel son los que mayor cantidad de gases producen, porque generan partículas de un diámetro de 2,5 micrones que el organismo no los puede frenar, e ingresa al torrente sanguíneo", amplió el fiscal.
