El senador peronista se refirió así al fallo de ese tribunal que dejó en suspenso la sentencia del juez Griesa en la que dijo que quedarán sin efectos los bloqueos que pesan sobre la Argentina si el país deroga las leyes Cerrojo y de Pago Soberano y cancela antes del 14 de abril los acuerdos firmados.
Para la Corte de Apelaciones de Nueva York, esa decisión de Griesa -que constituye uno de los ejes centrales de la votación que el Gobierno empuja en el Congreso- sólo quedará efectiva cuando ese tribunal se pronuncie sobre las 48 apelaciones efectuadas por los holdouts.
Pichetto evaluó que “con este hecho, la Cámara de Apelaciones establece que ejerce la jurisdicción del expediente”, por lo que a su entender “no existen reglas claras por parte de la judicatura americana”.
El senador sostuvo que esto “incorpora un hecho nuevo no previsto por el Gobierno”, que “deja latente el riesgo para la Argentina de seguir atrapada, aún pagando a los bonistas que acordaron, por la posibilidad de que se vuelva a colocar una nueva medida cautelar en la Corte de Apelaciones que le impida pagar”.
Por eso “es fundamental tener más claridad y más precisión sobre la situación actual y sus posibles derivaciones”, sostuvo el jefe de la bancada mayoritaria del Senado, quien subrayó que “es necesario que el Gobierno nacional clarifique ante la opinión pública y el Congreso quiénes son los bonistas que apelaron ante la Corte de Apelaciones de Nueva York”.
“Esa clarificación debe ser previa al tratamiento de las leyes que remitió el presidente Mauricio Macri al Congreso de la Nación”, advirtió Pichetto y agregó: “Entendemos que el Gobierno tiene capacidad de negociación pero para legislar el Congreso de la Nación debe contar con datos concretos”.
El legislador remarcó que, en primer lugar, “el estudio de abogados que representa a la Argentina debería definir cuanto antes con el juez Griesa y la Corte de Apelaciones sobre la eventualidad de nuevas cautelares y reclamos si la Argentina paga”.
“El objetivo de salir del default no es sólo pagarle a estos grupos que fueron legitimados por una sentencia injusta, avalada por todos los niveles de la Justicia norteamericana, sino recuperar la capacidad de pago a los que entraron de buena fe en los canjes de 2005 y de 2010, y evitar que se caiga la totalidad de la reestructuración de la deuda”, subrayó.
