Los dos hombres hasta ahora más poderosos del planeta fútbol cayeron en desgracia a causa a un supuesto pago de 1,8 millones de euros en 2011 por parte de Blatter a Platini por un trabajo de asesoramiento realizado en 2002 sin que mediase contrato escrito.
Para reducir la pena, la comisión de recursos tuvo en cuenta “las actividades y servicios” que Platini y Blatter “han ofrecido a la FIFA, a la UEFA y al fútbol durante años”.
Tanto Blatter como Platini anunciaron ya su decepción con la decisión y su intención de acudir al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS).