En la Segunda y Tercera Sección del Delta del Paraná, pertenecientes a San Fernando, que tienen una superficie de 900 km2, viven 3.200 habitantes. Allí, a pesar de la distancia con el continente, hay una fuerte presencia del Municipio para enfrentar el inconveniente.
El viajar al corazón del Delta hoy es una travesía complicada. La gran cantidad de camalotes dificulta muchísimo la navegación, y se transforma en un gran padecimiento para los isleños, que ven complicada la salida de sus casas y esperan que todo vuelva a la normalidad.
Ante la situación, el Municipio dispuso un operativo de asistencia y prevención de salud, por el que se distribuyeron alimentos secos y no perecederos, pastillas potabilizadoras y agua potable a los hogares. Durante el recorrido por el Delta, el Director de Medio Ambiente del Municipio, Gabriel Tato, recordó: “Desde que el Intendente Luis Andreotti decretó la emergencia hídrica diez días atrás, hemos concluido el barrido de asistencia por la Tercera Sección, que es la zona más afectada por la altura de los ríos”.
Y agregó: “Estamos muy conformes con esta tarea que han llevado adelante la Dirección de Salud, Desarrollo Social y el Destacamento de Guardaparques. Esta dinámica del río que sube y baja permanentemente hace que en los lugares más bajos de las quintas se estacione agua durante un período determinado de tiempo, y el contacto con los animales y el posterior paso del ser humano potencia el riesgo de contagiarse de leptospirosis”.
Tato finalizó destacando: “La leptospirosis es una bacteria que se contagia por contacto directo, generalmente a través de la orina de animales domésticos o roedores que queda estancada en agua dulce. El contacto directo de la piel puede llegar a transmitir esta enfermedad a las personas. Por lo tanto, se recomienda no estar descalzo en barro o pequeños charcos de agua, tratando siempre de tener botas de goma, especialmente en lugares con mayor profundidad, y tratar de eliminar todos los roedores de nuestro hogar”.
Al mismo tiempo, durante el recorrido, la Directora de Salud en Islas, Claudia Regenjo, explicó: “Nuestros tres hospitales de islas están equipados con los mismos insumos y profesionales, y atienden las 24 horas, reforzados con todo lo que requiere contener a la población que está inquieta, mediante operativos desde el Municipio tratando de llegar a cada casa y explicarles cómo manejarse ante situaciones de gravedad en el agua. Por eso, requerimos que la gente llame y nos ubique, porque nosotros siempre vamos a llegar, aunque sea complicado”.
Y agregó: “En el caso de mordedura de víbora, deben recostar al paciente y tranquilizarlo. Luego, llamar a cualquiera de los hospitales y explicar la situación, así el médico les da instrucciones mientras llega alguna de las lanchas ambulancia del Municipio”.
Algunos de los vecinos de la zona que recibieron la asistencia municipal, agradecieron y expresaron. “El año pasado no fue tan así ni duró tanto, en cambio esto está durando mucho. Para poder navegar esperamos la lancha de pasajeros. Y no vimos ningún animal extraño, así que está todo tranquilo”, recordó Mirna Zárate. Melcíades Leguizamón agregó: “Estamos trabajando más al fondo, y nos dieron todas las indicaciones por si encontramos alguna víbora”.
Y la vecina Dolores Mirto, que lleva más de 70 años viviendo en las islas, finalizó: “Estoy sorprendida, pero esto lo hemos visto otras veces, y mucho en el canal La Serna”.
(*) Se recuerda la dirección y teléfono de los tres Hospitales municipales:
Hospital Dr. Ramón Carrillo (Paraná Miní y Arroyo Chana) 4728-2434
Hospital Dr. Oscar Do Porto (Boca Carabelas) 4728-0026
Hospital Dr. René Favaloro (Paraná Miní y Canal 4) 4728-0270
VHF del Sistema de Emergencias en Islas: Canal 68
