Alcaraz, el exmpleado de una carnicería que había tenido en el pasado una relación amorosa con Sabrina Martín, la madre de la niña, era intensamente buscado como sospechoso de haber cometido el asesinato de la joven y del hermanito de Mía, un nene de tres años.
El sospechoso y la nena fueron hallados alrededor de las 11;00 en la intersección de las calles Falucho y Rivadavia, de esa localidad situada a 260 kilómetros al oeste de la ciudad de Buenos Aires, lugar en el que se había desatado una fuerte tormenta.
El ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, confirmó el hallazgo de la nena y la detención del sospechoso e informó que estuvo a cargo de personal de la Policía Local de Junín.
Según informaron medios locales, la Policía de Junín había recibido numerosas llamadas respecto a un joven con mal aspecto y acompañado por una niña que pedía monedas, e inclusive se ofreció a trabajar en una carnicería.
Granados sostuvo que la Policía Local ya había reaccionado cuando un chofer de un micro proveniente de la zona oeste del conurbano bonaerense había alertado a las autoridades sobre su extraño comportamiento como pasajero.
“Lo importante es que se pudo localizar sana y salva a la nena. Trabajaron alrededor de 500 personas en la búsqueda, la teníamos ubicada por testimonios deambulando en la zona oeste y vamos a establecer como fue que abordaron el micro”, sostuvo el ministro.
Se sospechaba además que Alcaraz decidió por azar bajarse en Junín y se supo que había preguntado por el precio de pasajes a distintos puntos del país.
Una vez que fueron detenidos, en el caso intervino el fiscal local Carlos Carlos Colimedaglia y ya se dirigía al lugar el fiscal a cargo de caso, Claudio Oviedo.
Oviedo reveló este mediodía que se dirigía en avión a la ciudad bonaerense junto a familiares, psicólogos y otros peritos, con el fin de constatar la situación.
El fiscal sostuvo que en principio Alcaraz fue detenido por el delito de “doble homicidio agravado por alevosía”, aunque se le podría añadir la “privación ilegítima de la libertad” de Mía.
Los cuerpos de Sabrina Soledad Martín, de 24 años, y su hijo Ian, de tres, fueron encontrados este lunes por la madrugada asesinados de múltiples puñaladas en la casa situada en Murillo 484, de El Palomar, en el partido de Morón.
El cuerpo de la mujer fue hallado con nueve heridas cortantes, mientras que el del pequeño, que se encontraba en otra habitación, tenía signos de haber recibido 22 puñaladas. Las sospechas apuntan a que el asesino se llevó a Mía junto con ropas de la nena, aparentemente lo único que se llevó del domicilio.
